En este primero de marzo, día frío e invernal donde los haya, en A Estrada, tierra cercana a la compostelana, se
inaugura una exposición, no solo oportuna, sino diría que necesaria.
Con el nombre que en el título de esta reseña figura, está centrada en las creaciones y enseres de personas luchadoras, sensibles y, pese a su notoria juventud, duras y maduras.
"Cicatriz" no está pensada para recorrer salas con inmensas vitrinas llenas de libros impresos y manuscritos, ni menos de altas y grandes esculturas. No. En ella prima la miniatura, ese pequeño objeto que nada más verlo nos llena de ternura.
Esa "muestra de esculturas y piezas literarias" que ahí se reúnen pertenecen a entrañables e inigualables protagonistas que son, a la vez, merecidamente homenajeadas como personas singulares:
Elena Velasco (Lugo, 1982) e
Iria Blanco (A Estrada, 1989-2021). Desearían las dos pasar desapercibidas, pero ya no es posible pues en todas partes y a todas horas nos hablan con su arte y su dulzura.
Esta exposición es buena muestra de su 'genio y figura', su altura de miras. Aunque no quieran, el halo de Iria
felizmente perdura y el de Elena eficazmente estimula.
A mi alumna estradense, le dedico ahora este espacio, haciendo hincapié en que, en efecto, a Iria le encantaba la escritura. Conservo sus misivas. Una de la más antiguas preguntándome -para acometer un trabajo de clase voluntario- la bibliografía oportuna. Eligió L. van Beethoven y, más en concreto, su pieza pianística "Para Elisa" WoO 59. Parecía fácil, pero como pudo comprobar, resultó ser toda una aventura.
Después, ya no dejaría de escribirme. Siempre había alguna causa: un viaje, una confidencia, una duda. De la tarima de un aula pasé a ser una amiga y, en cuanto podía, me ponía al tanto de lo que nunca consideró, en toda su crudeza, una fatídica desventura.
¡Prueba dura para tan joven criatura!... Respuesta sabia y sincera, con miedos, titubeos, pasajeros desasosiegos, pero sin denotar amargura.
Querida Iria, deseo que te guste leer estas líneas. Ten por seguro que te reservo unas cuantas para entregas futuras...
.
* Dedicado a Iria Blanco y a Elena Velasco, así como a todas las personas que, como ellas, sufren el zarpazo de una enfermedad oncohematológica tan dura.
.
Pilar Alén, Profesora de la USC
